En la introducción comenté brevemente por que me había decidido por la arquitectura y por que la había escogido sobre las otras artes. Me interesa profundamente, como dice el título, que es un arte de todo. Creo que el arte debe ser algo presente en la vida de toda persona, se que no todo el mundo tiene tanto interés en él como yo pero en mayor o menor medida todos necesitan un poco.
La arquitectura es el escenario de nuestra vida, la gente recuerda su vida en momentos y la atmósfera de ese momento puede venir dada por los edificios de alrededor. Nadie puede escapar a ella y es por eso que supone además una gran responsabilidad para el arquitecto.
Aún es muy pronto para decidirme pero tengo pequeñas ideas de como será mi visión de la arquitectura. En primer lugar concuerdo con la opinión funcionalista que defiende que la belleza de una obra reside en que esta represente la función que cumple, pero es más yo creo que debe representar el sentido que tiene. El sentido de una obra es para mi lo más importante, el primer edificio que pensé en hacer en base a mi opinión de como debe ser una buena construcción en relación a su sentido es una iglesia.
En “mi iglesia” (llamaré así al concepto que he creado de como debe ser) primeramente no hay un altar, y la misa se oficiará desde el centro, estando los bancos a su alrededor, de está forma todos estarán a la misma altura y además podrán ver la cara de los otros creyentes, pues es la gente la que forma la Iglesia. Además tendrá planta circular, por ser tan históricamente la figura que representa la perfección y debe estar rodeada de naturaleza, pues es en ella donde podemos ver más directamente a Dios. Toda ella ha de estar construida con materiales que respeten al medio ambiente, también en su producción. Y lo más importante es que debe tener una gran cúpula de cristal para que durante la misa se pueda mirar directamente a Dios.
El ejemplo explicado anteriormente es una explicación extremadamente específica de una iglesia en la que llevo pensando mucho tiempo y que mezcla mi amor por la arquitectura y las reflexiones sobre Dios que ocuparon mi tiempo a lo largo de mi periodo de preparación para la confirmación. En carácter general quiero crear espacios que evoquen la reflexión, es para mi lo más importante que la estancia diseñada por mi conjure en las personas una necesidad de replantearse el espacio y pensar.