La momia de ramses
¿Como de importante es la función para el edificio? En el libro ”Cultura y simulacro” de Jean Baudrillard se tratan muchos temas referentes a la sociedad y la diferencia entre lo real y lo ficticio, siendo lo falso un simulacro creado cuidadosamente para que creamos que es la realidad. Entre estos engaños hallamos el valor otorgado a algunas cosas a las que teóricamente hemos arrebatado todo valor, esto lo explica con el ejemplo de la momia de Ramses, al cuál destruyeron museificándolo. Le damos ahora a la momia de ramses un enorme valor exponiéndola de lado en lado y tras una vitrina, pero lo cierto es, que cuando sacamos la momia de la tumba le arrancamos todo su valor real, el que le dieron en su momento y ahora disimulamos su valor original o simulamos un valor nuevo.
Ahora impresiona en el museo por que es antiguo, por que es una prueba de la longevidad de nuestras civilizaciones pero en su momento no era esa la intención. Se le momifico y enterro en un gran sepulcro con un motivo, que poco tenía que ver con ser descubierto posteriormente y ahora al sacarlo ya es nada. Si lo vieran las personas que lo enterraron para ellos ya no tendría sentido.
Eso me hace pensar que arrebatar la función a un edificio es lo mismo, al perder esta, podemos admirarlo por su belleza o grandeza, pero ya no tiene el valor del edificio original.
El primer ejemplo que se me viene a la cabeza son las pirámides de Egipto, grandes construcciones funerarias cuyo objetivo era preservar la momia, pero si esta es privada del la momia pierde todo su valor original. Podemos admirarlas por su monumentalidad y calidad técnica, pero jamás debemos fingir que estamos admirando el trabajo original de los constructores, pues este se ha perdido al quitar su función, admiramos ahora el nuevo concepto que hemos creado de ellas.
Cuando pienso en ello imagino una caja escondida, una persona le ha otorgado a está caja un único valor que es ser la caja más escondida e imposible de encontrar del mundo, bien pues si por algún casual alguien la encontrara ahora la pondría en el museo con el título de la caja más escondida, pero el simple hecho de encontrarla le arrebata ese título.
Pero llegado a este punto se crea en mi un debate; en mi ciudad hay un teatro, este llevaba en desuso muchos años y yo ni si quiera sabía de su existencia, hace poco se acondicionó y se reabrió como un Burger King. Hubo muchas quejas ya que creían que era una burla para un teatro tan bonito ser convertido en un lugar de comida rápida, perdiendo su encanto original, sin embargo desde entonces mucha gente va, que sino fuera por el cambio jamás habrían conocido el interior de aquel teatro. ¿Está bien por que ofrece la posibilidad de dar uso a ese espacio de nuevo? ¿Podemos admirar la decoración interior de la misma forma sabiendo que es actualmente y que pretendió ser? No consigo decidirme, siempre que voy siento pena por aquel cambio, pero lo cierto es que este fue el único que me permitió verlo en primer lugar. Supongo que si olvidas a los arquitectos y su proyecto original, su deseo de crear un espacio dedicado al arte, puede disfrutar de él mientras comes una hamburguesa.